Residencia de estudiantes Garbí (Barcelona): una solución arquitectónica duradera, estética y sostenible
Siempre te dicen con nostalgia que hay una etapa en la vida que no podrás olvidar y que desearías volver a vivir. Esa etapa a la que se refieren como aquellos maravillosos años, o lo que es lo mismo, la etapa universitaria.
Desde que somos pequeños nuestro entorno nos repite lo importante que es ir a la universidad. Es como una meta que nos recuerdan constantemente tanto la sociedad como la familia.
Y junto con la mayoría de edad llega la primera gran decisión. El gran dilema que supone elegir qué estudiar y en qué universidad.
Yo recuerdo con mucho cariño aquella época (y todo lo que vino después).
Los tuppers con comida preparada de mi madre se hicieron famosos entre mis compañeros. Y es que para muchos de nosotros aquellos maravillosos años supusieron un cambio de vida: cambio de ciudad, de amistades, de costumbres…
Es en ese punto donde se encuentran los jóvenes que deciden optar por Barcelona como la ciudad en la que cursarán su carrera, y a ellos está dirigida la residencia Garbí.
Esta nueva residencia de estudiantes ubicada en la calle de Viriat, colindante con la famosa Estación de Sants, es un edificio de altura (54 metros sobre rasante), previsto con dos plantas sótano y 16 plantas más sobre rasante.
Sobre este proyecto hemos hablado con Jordi Areu, arquitecto socio del estudio Blanch + Conca Arquitectura: “Nuestra arquitectura se sustenta sobre tres pilares básicos: funcionalidad, coherencia constructiva y belleza. En el caso que nos ocupa, una residencia de estudiantes, ejercía de elemento integrador y consolidador del barrio, siendo una pieza de transición en un tejido urbano lleno de contrastes y que alcanza su máxima expresión en la fachada sur, donde se unen los dos volúmenes tratados con colores y texturas diferentes. De esta manera remata y ejerce de telón de fondo de la Plaça dels Països Catalans, una de las zonas más transitadas de Barcelona”.
Pero, ¿por qué una fachada ventilada de ULMA?
Jordi Areu nos ha dado las claves.
1) Durabilidad: paneles de fachada ULMA
“Nos ofrecía unas características técnicas, una durabilidad acorde con nuestras exigencias y una relación calidad-precio ajustada”.
Vamos a profundizar un poco más.
La resistencia de nuestros paneles es muy alta. Al tratarse de un material no poroso, su bajo nivel de absorción de agua (0,1%) permite un comportamiento eficiente frente a los cambios bruscos de temperatura. De este modo se garantiza la durabilidad de la fachada a lo largo del tiempo.
“Es un material que ya conocíamos. Dada su versatilidad y altas prestaciones, lo habíamos utilizado en otros proyectos. En este caso, las diferentes texturas que nos ofrecía fue el elemento definitivo para escogerlo para nuestra fachada”, nos explica Jordi.
2) Estética: texturas y juntas
Nuestro sistema es un claro ejemplo de que la durabilidad y la resistencia no están reñidas con la estética.
Después de más de 30 años trabajando en diferentes proyectos arquitectónicos, sabemos que promotores, proyectistas y usuarios valoran mucho la estética a la hora de abordar proyectos.
Es por eso que en ULMA contamos con una amplia gama de colores y texturas con un abanico de posibilidades para revestir fachadas.
La textura estriada utilizada en la Residencia Garbí, aun siendo de color blanco, aporta dinamismo a la fachada. En palabras de Jordi, “su naturaleza tridimensional, provoca un efecto cambiante a lo largo del día, en función de las luces que recibe y las sombras que proyecta”.
Además, nuestro sistema de instalación permite distintas opciones de junta. En este caso, el objetivo era darle continuidad a la fachada con placas de gran formato y juntas reducidas de 3mm.
“La colaboración con ULMA durante el proyecto y, más tarde, en su puesta en obra, fue básica para asegurar el efecto buscado con juntas reducidas que nos permitían percibir un macro módulo más acorde con la escala global del edificio y su emplazamiento”.
Antes de seguir, te invito a que eches un vistazo a las fotos que acompañan este texto para ver a qué se refiere Jordi.
3) Construcción sostenible
Entre las soluciones arquitectónicas y constructivas más sostenibles, la fachada ventilada es una de las más apreciadas.
¿Sabes por qué?
Si tú también buscas una solución arquitectónica duradera, estética y sostenible, contáctanos para saber cómo podemos ayudarte.
Pues entre otros motivos, por ser un sistema con el que se logra un notable ahorro energético y un óptimo aislamiento térmico y acústico del edificio, consiguiendo así eliminar tanto los puentes térmicos como los problemas de condensación y humedad.
En Blanch + Conca Arquitectura están 100% comprometidos con el medio ambiente y tienen como objetivo que cada nuevo proyecto sea aún más sostenible que el anterior.
“Desde las primeras líneas e ideas debemos pensar en optimizar recursos, ofrecer soluciones constructivas lo más sostenibles y durables posibles. Es una necesidad que afecta a toda la sociedad, pero, en especial, a nuestro sector. La sostenibilidad empieza por la propuesta arquitectónica, ya que nos marca el camino a seguir.”